Revolución copernicana
Artículo publicado en diario Perfil del domingo 28 de agosto de 2011
Asimilar la globalización a una revolución copernicana es la tesis de Fernando Iglesias en La modernidad glob@l (Sudamericana), lo que a su juicio implica comprender que las naciones no han desaparecido ni van a desaparecer en lo inmediato, como se anunciaba hace una década. Lo que sí está desapareciendo es la era en la que las categorías nacionales ocupaban el centro del escenario social. Esto obliga a un reemplazo de los viejos conceptos.
Los términos “global” y “globalización” son indiscriminadamente usados para describir todo tipo de procesos. Con la modesta pretensión de ofrecer dos conceptos-guía definiré aquí a la globalización como la extensión de los fenómenos, procesos y sistemas sociales por encima y más allá de las barreras nacionales y territoriales, y a la Modernidad global como el producto de la consiguiente reorganización radical del contexto social que hace que en esta etapa de la Modernidad los procesos globales se adueñen del centro de la escena… Dado que el término “globalización” se refiere a la extensión espacial de las acciones humanas, el primer uso de instrumentos tecnológicos capaces de extender sus alcances –el primer caballo domesticado, el primer tronco de árbol usado para cruzar un río– podría ser considerado como el inicio de la era global. Desde este punto de vista, la historia de la humanidad es la historia de la globalización de la humanidad, la larga y heroica saga de la expansión de la raza humana y su control sobre el espacio que va desde las sabanas africanas hasta alcanzar el resto del planeta. Sin embargo, lo que caracteriza a los procesos sociales actuales es la superación de las dimensiones espaciales fijadas desde hace siglos en la escala nacional. De allí que la globalización sea, a la vez, un fenómeno tan viejo como la humanidad y un proceso enteramente nuevo. Y de allí también su actualidad y la vocación de este libro por aportar al análisis de la tendencia globalizadora intrínseca de la Modernidad: el intento de alcanzar escalas cada vez mayores, constituyendo nuevos escenarios en los cuales las condiciones y los modos de la vida humana cambian radicalmente.
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2 comentarios:
¿Sos filósofo? ¿Estudiaste en la UBA o en alguna universidad privada?
Fernando, consigan ya boleta única y numerada!!
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